Comunicaciones 5 - Almagro 1
Almagro tocó fondo, jugó muy mal, recibió cinco goles y terminó descontrolado con dos hombres menos por las expulsiones de Iglesias y Maidana. Rizzi se fue insultado por allegados del tricolor que estaban en el sector visitante. El equipo perdió el rumbo y no mostró actitud. Pave tuvo responsabilidad en dos goles.
El “ole, ole, oleee” en el segundo tiempo que bajaba de la tribuna de Comunicaciones, van a quedar grabadas como tal vez el momento mas humillante a nivel futbolístico de los últimos tiempos que recibió Almagro. Y con ese “Ole, Ole” se resume lo que fue el partido para el tricolor, cada “ole” se clavaba en el corazón como si fuese un bisturí.
Estamos heridos desde hace rato y esto fue una demostración mas de la situación que vive nuestro querido Almagro, perder por tan tamaña goleada con Comunicaciones, con el respeto correspondiente al cartero, es una vergüenza.
La tarde comenzó torcida desde los treinta segundos de comenzado el partido, cuando en una desinteligencia defensiva y un error del arquero tricolor pudo haber dado la ventaja desde el principio del encuentro. Almagro se paró distinto, no jugó a nada, el tiki tiki marca registrada de Rizzi, brilló por su ausencia por primera vez en el campeonato, Almagro no fue el mismo que puso contra las cuerdas a la sociedad de fomento hace dos semanas, solamente Burzac jugó en su nivel habitual, Figueroa desconocido, Palavecino como volante central duró quince minutos y luego volvió de central, Maidana los miraba pasar y Acosta y Gómez estáticos por los costados. El tricolor se fue perdiendo el primer tiempo 1 a 0.
El DT tricolor al ver todo desacomodado, en el entretiempo realizó tres cambios y si el reglamento lo hubiese dejado hacia nueve. La segunda mitad comenzó con el empate tricolor que llego desde los pies del payaso Bonfigli, pero solamente fue una ilusión pasajera porque enseguida el local realizó el segundo, el tercero, el cuarto y el quinto. Con Almagro descontrolado se fueron expulsados Maidana e Iglesias.
Fueron de esas tardes que nunca más un hincha de Almagro quisiera vivir, pero que seguramente nunca se va a olvidar, ojalá este palazo sirva para reaccionar y salir, porque hoy tocamos fondo.