Las repercusiones, tras la conferencia de prensa de Juan Carlos Carinelli no se hicieron esperar.
Desde todo el arco opositor surgieron críticas.
Muchas de ellas tienen que ver con la metodología elegida para la comunicación, llamando a los medios partidarios.
Hay quienes hablan de persecución, y acusan a la actual CD de “cerrada y soberbia”.
Lo cierto es que nadie logró negar, ni siquiera en partes, el discurso del Presidente.
Respecto a las acusaciones hacia los directivos anteriores vale recordar que dentro de las promesas preelectorales se destacaba la intención de llegar a la verdad, mediante la investigación.
Es inédito pero está sucediendo, y la mayoría de los socios votó para que esto pasara.
Ya hubo suspensiones y se evalúan posibles expulsiones.
Si este proceso se lleva a cabo seriamente, y se llega a comprobar que algún ex directivo hizo adrede algo indebido para obtener rédito personal, debe castigarse.
¿Alguien podría oponerse a esta ecuación?
En el plano estrictamente futbolístico podría decirse que el talón de Aquiles de esta gestión está en los resultados deportivos futbolísticos, y sobre ello Carinelli hizo un mea culpa, reconoció errores y vaticinó cambios en la Sub Comisión de Futbol.
En definitiva la conferencia de prensa le sirvió al oficialismo para ratificar el rumbo tomado en los que denominan “Refundación” a partir del reordenamiento económico y administrativo, la investigación sobre corrupción y consiguiente castigo si se demostrara culpabilidad, gestión de obras.
El reconocimiento de falencias en el aspecto futbolístico es una novedad, ya que se convirtió en la primera autocrítica de este presidente, con la que logra transmitir humildad y no disimula algunas diferencia en el seno de la CD.
Muchas veces la actual dirigencia es esclava de las formas y no del fondo de sus decisiones. Algunas actitudes profundizan la polarización política dentro de la institución y eso no es bueno.
El desafío de lograr paulatinamente una apertura le permitirá “universalizar” muchas de las importantes decisiones que se están tomando.
Esto resultará indispensable para que aquellos que no están “ni de un lado, ni del otro” formen parte activa de este momento histórico.
Por último vale decir que la oposición deberá ser más creativa.
Si solo se encargan de remarcar que algún periodista no fue debidamente invitado o alguna Página fue muy provocativa con un título, o critican salvajemente el presente futbolístico de manera intencional, entonces no le alcanzará.
El poder funciona con equilibrio, por ello es necesario que si quieren controlar lo hagan seriamente, si quieren defender a los investigados presentes sus pruebas, si quieren colaborar con lo futbolístico se acerquen o empiecen a escribir su plataforma política para las próximas elecciones.