LA CRISIS TAMBIEN SE DEVORO A TONELOTTO

La misma CD que hace nueve días avaló la exclusión de casi un tercio del plantel, entre ellos a Maxi Castano, ayer anunció que "debido a los resultados adversos, Luis Tonelotto, dejo de ser el Director Técnico de Almagro de común acuerdo con la dirigencia".
Fueron suficientes 54 días en el cargo, con 9 partidos jugados sin poder ganar, cuatro empates y cinco derrotas para que esta racha diabólica se devorara a un tipo tan querido y bien recordado como Luis Tonelotto, nuestro querido "Tonegol", acompañado nada menos que por el "héroe de Varela" Roberto Demus. Hoy esa misma CD es la que está decidiendo quien será su sucesor.

La racha sin triunfos no tiene una sola explicación, ni tampoco un solo culpable, aunque nos duela tanto que forcemos nuestro juicio y cada uno elija a su responsable.
Lo que si llama la atención es la sensación de que no se actúa pensando en las variables que puede presentar el futuro inmediato.

LA IMPROVISACION COMO ENEMIGA

Tal como el ajedrez obliga a pensar varios movimientos propios adelante, y evaluar los del rival que nos condicionarán, la CD debiera empezar a decidir en proyección.
Entonces si sabés que si no gana le queda una semana al DT, no te la juegues apoyando ciegamente la exclusión repentina de tantos jugadores y pagando el costo político de "cargarte" a uno de los últimos ídolos en actividad, el "viejito" Castano que tantas alegrías nos dio. Y que si alguien cree que ya no está para jugar solo alcanza con esperar hasta fin de contrato y no exponerlo, ni exponer al Club que parece no cuidar a sus históricas figuras.
¿Para que, nó?
Ahora nos quedamos sin Luis y sin Maxi...
Pasó con Lucas Sparapani también, sometiéndolo al desgaste de dejarlo colgado por un tema económico y volviendo atrás en la decisión que el mismo presidente manifestó como irrevocable, para  terminar viéndolo a pisar el pasto del Tres de Febrero por decisión del DT inmediatamente  después de haber solucionado lo "insolucionable".

NO REPETIR ERRORES

No debe ser fácil estar en los pantalones de los actuales dirigentes, y tal vez la desesperación por revertir la situación los lleve a actuar de esta manera.
Aún contra las cuerdas y debilitados, no vale la pena insistir intentando salir tirando piñas al aire con los ojos cerrados, sino pensar y buscar dar primero un golpe certero que nos de aire, para así buscar combinarlo con un segundo que nos permita dar un paso adelante, salir del sometimiento y buscar la conquista.
El futuro demanda decisiones sólidas y meditadas, búsqueda de consenso y tal vez apertura, que no repita el ostracismo del final de la CD anterior.
Queda tiempo aún, aunque no mucho...