Por la segunda fecha del torneo y en el debut como local, el tricolor igualó sin goles ante el conjunto correntino. Un trámite muy trabado y luchado por momentos, con poca generación de juego y pocas llegadas de peligro en ambos arcos.
El debut de Almagro en el Tres de Febrero tuvo más expectativa en la previa que emociones reales durante en partido.
Fue un empate frente a un equipo duro, que supo pararse de visitante con todas las líneas ordenadas y mostrando un esquema compacto, avanzando y retrocediendo en conjunto.
Almagro tuvo ráfagas de buen juego, en los que se mostró algo superior pero por momentos se perdió, dejándole la pelota a Boca.
Sólo dos chances de peligro en cada tiempo.
En el primero donde el visitante tuvo una oportunidad clara para convertir a través de Cángele quien encaró para el área y remató, pero tapo Centeno.
Luego Hoyos desperdició una chance también ante al arco.
En el complemento Almagro lo tuvo con un envíó que no pudo conectar Cháves en el segundo palo y un tiro libre de Ledesma que desvió el arquero.
Los más destacados del equipo Franco Quiroz y Marcelo Scatolaro.
No tuvo Almagro generación de juego en el medio, tanto para abastecer a sus delanteros como para llevar peligro al área rival con sus propios volantes.
Quienes pueden manejar los hilos del equipo o desequilibrar como Chaves o Ruiz Sosa no lograron asociarse, también ante un rival que le quitó espacios al tricolor y se paró bien en un bloque muy difícil de romper.
Almagro también pareció priorizar ese orden defensivo por sobre el juego. Orden que a ambos equipos les terminó dando resultado por las escasas jugadas de peligro que se generaron en ambos arcos.
Pero por otro lado un orden que les impidió sacar ventaja en un encuentro que terminó siendo un empate aburrido.
Tendrá que mejorar Almagro, encontrarle la vuelta en esa mitad de cancha para generar juego, porque en lo defensivo en la marca le dió resultado tanto con Quiroz y Scatolaro, por el despliegue y la entrega que mostraron ambos.
