Almagro cayó derrotado 4 a 3 por el descendido Atlético Paraná, en un partido que arrancó ganando, pero que el local logró darlo vuelta y marcar cuatro goles en el último cuarto de hora del primer tiempo.
Solo el hat-trick del Puma Reniero, que permitió acercarnos en el marcador, nos regala una caricia en esta sucesión de pálidas que estamos viviendo los hinchas de Almagro.
Como explicar un 4-3.
Para la gran mayoría un partidazo.
Para los entrerrianos, un mínimo atenuante ante la desgracia del descenso.
Para Almagro un nuevo golpe que alarga la sensación de amargura en el campeonato de los "mil técnicos".
El gol tempranero de Reniero (que hoy metió tres y nadie se explica como pudo ir al banco ni medio minuto) permitió ilusionarnos.
Encima fue tras una jugada preparada y nada mejor que esa sensación de que el trabajo de la semana dio resultados para arrancar el ciclo.
El tricolor supo aprovechar esta ventaja inicial y hasta la primera media hora dominó el partido.
Pero llego la tormenta y con ella 4 pepas en 17 minutos.
A los 29 Cadenazzi de cabeza al piso, tras un centro de Ekkert y a los 32 el experimentado Noir también de cabeza tras un centro de en medio de Vercellino y una serie de patinadas en el área de los jugadores de Almagro.
A los 37 tras tres tiros de esquinas sucesivos muy cerrados, una pelota que derivó en varios rebotes y una salvada en la línea de gol que el juez de línea pitó gol, muy dudoso para todos.
Siete minutos mas tarde llegaría el cuarto y el final del primer tiempo para irnos al vestuario, mal, 1-4.
En el complemento el DT metió a Quiroz y a Acosta en lugar de Scatolaro y Ruiz Sosa.
El equipo se adelantó unos metros, pero salvo la calidad de Grahl y Reniero, el resto fue todo voluntarismo.
A los 7 llegó el segundo del Puma tras un remate de Barboza que salvó el arquero Crusat pero dio rebote que rescató Acosta y sacó un pase gol a Reniero que metió el segundo.
Fuen entonces cuando Almagro se animó y fue en busca del descuento.
Sardella se metió de dos, Grahl de doble cinco con Quiroz, Sansotre de 8 y Barboza de punta por izquierda y en el área Reniero y Acosta.
A los 29 llegó el tercero del tricolor y fue nuevamente Reniero que sacó un remate por lo alto al arco y con destino de gol, que el arquero salvo tras una volada, pero dando un nuevo rebote que, esta vez, el mismo goleador conectó para marcar su tercer gol de la tarde.
A los 33 llegó la jugada que pudo ser el empate: Sansotre recuperó una pelota el tres cuartos de cancha, se la dio a Grahl que abrió el pie izquierdo y cambió de frente habilitando a Iglesias, que volvió a cruzarla con un centro rasante que por muy poco no pudo conectar Reniero.
Pudo haber sido el empate y el cuarto para el goleador, pero lamentablemente no sucedió.
Los 15 finales fueron de desesperación y búsqueda de Almagro que no logró concretar y algunas llegadas del local que aún descendido y, tal vez por ello algo más relajado, defendió los puntos como si le sirvieran.
Nueva derrota para el tricolor que termina el campeonato de una manera que hace unas pocos meses parecía inimaginable.