Almagro igualó 1 a 1 con All Boys en Floresta y dejó pasar una nueva oportunidad de prenderse en el lote de los equipos que pugnan por entrar al reducido. El marcador lo abrió Persia para el local a los 35 minutos del primer tiempo, mientras que el empate llego tras un cabezazo de Da Rosa a los 10 minutos del complemento. Sobre el final el juez Ramiro López invalidó un gol de Almagro por una inexistente falta en ataque de Servetto.
Este Almagro es un equipo irregular.
Hasta aquí ninguna sorpresa, ya que solo hace falta observar como se llegó hasta estas ultimas tres fechas para confirmar los altibajos, fecha a fecha, que confirman esta primera afirmación.
Pero lo nuevo que podemos afirmar es que esa misma irregularidad se manifiesta dentro un solo partido, como el de hoy por la tarde en Floresta.
Pareciera que hay “varios Almagro” en un mismo partido.
Uno que arranca con todo como en los primeros 10 minutos, que se muestra atento y ordenado en todas las líneas, que llega con peligro, que presiona en todos los sectores.
Y hay otro, que parece apoderarse cual demonio repentinamente y que hace todo lo contrario: aparecen los desacoples defensivos, se esconden los creadores, desaparece la sincronización y aparecen las torpezas y el mal trato a la pelota.
Hoy jugaron esos dos Almagros y para completar la escena de absurdos se encontró en desventaja cuando menos lo merecía y encontró la igualdad cuando parecía que son venia encima una goleada.
Tal vez el partido de hoy pueda dibujar la síntesis de lo que es este campeonato para Almagro: un equipo que te ilusiona un rato, pero al final siempre te defrauda.
Vaya a saber que cobró el inefable Ramiro López para anular el segundo gol de Almagro, sobre el final de partido, que nos hubiera permitido sumar de tres y mantener las esperanzas.
Si todo eso hubiera pasado nuestro ánimo seria otro, aunque no dejaríamos de afirmar la frase del inicio: “ESTE ALMAGRO ES UN EQUIPO IRREGULAR”.