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Por Rodrigo Cosenzo y Juan Pablo Zumpano
Hay noticias que no son agradables de publicar y los fallecimientos están dentro de ellas...
Sin embargo, cuando parte un ser que ha recorrido mucho tiempo en este mundo y además deja huellas trascendentes, la tristeza se atenúa y el reconocimiento empieza a ocupar el lugar de los lamentos.
La muerte de Pedro Benedetto impacta de esa manera en el mundo del Club Almagro y marca tal vez el fin de una etapa.
Pedro encarnaba el último eslabón de una cadena de viejos dirigentes: tal vez fue el último de su camada.
Dedicó la mayor parte de su vida al Club Almagro y con diferentes intensidades estuvo siempre vinculado a la institución.
Fue presidente entre 2007 y 2008, aunque se destaca por haber integrado numerosas Comisiones Directivas e incluso por haber colaborado desinteresadamente con CD de las que no formaba parte.
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| Benedetto, Armando Zumpano y Rodrigo Cosenzo |
Pedro Benedetto "hacía magia" en la AFA cuando Almagro lo necesitaba.
Lo hacía en silencio.
Era un tipo de pocas palabras, humilde y algo tímido quizás.
Pero nunca faltó a su compromiso con el Tricolor.
Era muy reconocible por su estética, que se mantuvo similar en toda su vida.
Calvo desde joven, con un bigote finito y lentes redondos.
Iba a la cancha con saco de traje, usaba boina y veía los partidos agarrado del alambrado, pegado siempre al campo de juego.
La ultima vez que nos vimos fue el octubre de 2021 cuando fue a votar a la Sede.
Su presencia fue impactante.
Con 90 años, saliendo de la pandemia del COVID y en medio de un clima pesado por las controvertidas elecciones, él se paseaba manso entre los socios que concurrían a votar.
Se encontraba igual que siempre.
Dialogamos un rato y aceptó que le sacáramos algunas fotografías.
Estaba muy lúcido.
Hablamos de Almagro: del pasado, del presente y del futuro.
Recordamos nombres de dirigentes que ya no estaban entre nosotros y en particular se refirió a nuestro querido abuelo: Armando Zumpano.
Entre sonrisas nos contó algo que ya sabíamos, que durante décadas todos los fines de año lo visitaba en su negocio para brindar.
No pasaba un año en el que no repitiera ese ritual.
Así era Pedro Benedetto.
Consecuente con todo lo que hacía, especialmente con Almagro.
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| Pedro Benedetto y Juan Pablo Zumpano - Sede Almagro 31/10/2021 |
